Reservas en alarma: Brusco declive en el valor de la Soja
La cotización de la soja experimentó un descenso marcado, sumergiéndose por segunda vez consecutiva en el mercado de Chicago el miércoles 17 de mayo, alcanzando niveles por debajo de los $500. Este retroceso se atribuye al avance imparable de la cosecha en los Estados Unidos y a la feroz competencia global en el suministro, agravada por la ascensión del dólar a nivel mundial. El trigo y el maíz, a su vez, también padecieron pérdidas significativas.
La soja se desplomó un 2,3%, cotizándose a 490 USD por tonelada en el mercado de Chicago, estableciendo así su mínimo precio desde septiembre de 2022 y acumulando un descalabro del 20% durante el último año. Por su parte, el maíz y el trigo se depreciaron un 3,5%, situándose en USD 221,06 y USD 229,83 por tonelada, respectivamente.
Durante esta semana, los discursos emitidos por los funcionarios de la Reserva Federal de los Estados Unidos han sembrado dudas acerca del futuro de la política monetaria. La titular de la Fed de Cleveland afirmó que no existen las condiciones adecuadas para mantener las tasas de referencia estables, mientras que su homólogo en Richmond mencionó su disposición a considerar incrementos adicionales en caso de ser necesario. Estas declaraciones auguran la posibilidad de un próximo aumento en junio, fortaleciendo así al dólar y generando como consecuencia un incremento en los precios de los productos básicos.
Por otra parte, según el informe de evolución de cultivos del USDA, la cosecha de soja en los Estados Unidos avanza a paso firme, alcanzando un 49% de progreso, superando así el promedio de los últimos cinco años. Sin embargo, la débil demanda de exportaciones estadounidenses ejerce una presión adicional sobre los precios. En cuanto a los contratos de maíz, la exuberante cosecha en Brasil debilita las exportaciones estadounidenses, provocando una disminución en las cotizaciones. Además, el rápido avance de las cosechas en los Estados Unidos, que ya alcanzan un 65%, supera el promedio de los últimos cinco años.
Finalmente, los futuros del trigo finalizaron en terreno negativo debido a ventas técnicas, acumulando así dos días consecutivos de caídas, luego de que el informe WASDE revelara reducciones en la oferta y un aumento en el consumo interno de trigo en los Estados Unidos.