El agro de Estados Unidos y los Países Bajos lideran la transformación mundial en la agricultura
Automatización, negocios agrícolas y sostenibilidad: transformando el sector
Los agros más avanzados del mundo, Estados Unidos y los Países Bajos, se encuentran en la necesidad de transformar su estructura productiva y de servicios en los próximos siete a diez años.
En el caso de Estados Unidos, los farmers, los propietarios agrícolas del país, se enfrentan a una carencia prácticamente absoluta de trabajadores rurales. Como respuesta, han optado por la automatización de sus tareas. Han empezado por automatizar sus tractores y cosechadoras, lo que ha llevado a que la producción agrícola se manifieste principalmente en los tableros de control digital.
Actualmente, los trabajadores agrícolas estadounidenses son especialistas altamente capacitados con formación terciaria o universitaria, representando menos del 20% del personal tradicional. En Estados Unidos, las escuelas de negocios agrícolas están en auge, enfocadas en formar empresarios con una visión global de los negocios y los mercados.
En resumen, los farmers han dejado de ser productores agrícolas avanzados para convertirse en empresarios altamente calificados, con una visión global.
Un ejemplo significativo de esta transformación es la Universidad de Oklahoma, que ha renovado su carrera tradicional de Agronomía y la ha convertido en el Sistema de Tecnología Agroalimentaria. Este sistema abarca el estudio de los suelos, las plantas y las ciencias de la vida, utilizando la Internet de las Cosas y otras tecnologías de la cuarta revolución industrial para la investigación y formación.
El objetivo del Sistema de Tecnología Agrícola de la Universidad de Oklahoma es enseñar a pensar de manera global, científica y tecnológica.
Por otro lado, los Países Bajos enfrentan un desafío completamente distinto en términos de transformación agrícola. Con una densidad poblacional de 507 personas por kilómetro cuadrado, se convierten en la nación más densamente poblada del planeta.
A pesar de esto, los Países Bajos se han convertido en el segundo exportador mundial de agroalimentos después de Estados Unidos. Realizan esta tarea a través del puerto de Rotterdam, la principal entrada a la Unión Europea. En el centro del dispositivo agroalimentario de los Países Bajos se encuentra la Universidad de Wageningen, el mayor centro de conocimiento agrícola a nivel global.
Actualmente, el gobierno de los Países Bajos ha decidido disminuir a la mitad la emisión de nitrógeno en 2030, con el objetivo de reducir drásticamente la emisión de dióxido de carbono (CO2) en ese período. Esto significa que la agricultura holandesa deberá reducir a menos del 23% la emisión actual de CO2 en los próximos siete años. De cumplirse, sería una hazaña sin precedentes en la historia de la agricultura mundial.
Es asombroso que más del 90% de esta disminución se derive únicamente de dos subsectores: la ganadería y los fertilizantes agrícolas.
La antigua Holanda, donde un tercio del territorio es creación artificial que solía estar cubierto por las aguas del Mar del Norte, alberga uno de los principales productores de flores del mundo. Estos mercados florísticos europeos son abastecidos por los Países Bajos, un logro impresionante.
En el núcleo de la Universidad de Wageningen se encuentra el Instituto Alteira, su gran centro de Ciencias del Medio Ambiente.
El sistema implementado en los Países Bajos, la cuna del capitalismo comercial previo a la primera revolución industrial, ha desencadenado una serie de cambios y avances en la agricultura a nivel mundial.